Por: Ernesto Osorio (Grupo Reforma - 27-05-06)

Tiene el recital poca convocatoria; llegan menos de 100 y se ve auditorio vacío

Los aires de Nueva Orleans soplaron ayer bajo el cielo de Azcapotzalco.

Del mismo modo que los vientos huracanados de "Catrina" desangelaron en octubre pasado las calles de esa ciudad de Estados Unidos.

Para un concierto de blues en donde hubo poca difusión, el resultado fue obvio y se notó en la asistencia, pues el auditorio con capacidad para 870 personas, sólo llegaron 72.

Aún así el programa de difusión cultural de la Delegación Azcapotzalco tiene programado en este foro eventos como ópera, teatro, danza clásica y cuentacuentos de entrada gratuita, y para este fin de semana anuncia el musical "Spiderman" con efectos especiales en dos únicas funciones, también de manera gratuita.

La tarde de Blues hizo que por algunos instantes los vecinos de esta demarcación del norponiente vibraran con la música que se perdía en el desangelado foro.

Juan Carlos Rodríguez, quien vende productos para repostería, llegó al concierto con sus cuatro hijos y una amiga desde Xochimilco para alcanzar lugar, porque pensaron que se llenaría, y bastaron algunos "frutsis" congelados y palomitas para pasarla bien con los niños que, semiaburridos, aguantaron el espectáculo.

El desangelado auditorio no impidió que amantes de esta música, como la familia Rodríguez, disfrutara del concierto.

La música fue llevada por la Asociación Mexicana de Amigos del Blues y asistieron los grupos La Tregua, La Rambla y Omnibús, que intentaron llegar a tocar la sensibilidad de los asistentes.

Una mezcla entre los clásicos de este ritmo fue el regalo de la noche: "I'm Ready", "I don't want a woman", "Hoochie Hoochie Man", y otros locales como "La Herida", "La Culpa" y "La Carta" hicieron vibrar a los asistentes, todos ellos vecinos de la demarcación que por un rato se sumieron en la penumbra artificial del Foro Azcapotzalco que no requirió de espectaculares escenografías o juegos computarizados de iluminación.

Una esfera de espejos y el intercambio de luces entre amarillo y rojo fueron suficientes para crear la atmósfera mágica para el blues.

Arriba en el escenario y todavía en mangas de oficina, la armónica principal de La Tregua, interpretada por el doctor Octavio Espinoza, marca los tiempos para el aplauso.

Más tarde, este mismo servidor público de la Secretaría de Seguridad Pública lamentó la poca difusión que se le dio al evento, y todavía con su gafete al cinto comenta que "ejecutar el blues desestresa a cualquiera, y te da otra visión del universo".

Al son que me toquen

Los asistentes tuvieron un concierto casi privado

870 butacas tiene disponibles el Foro Cultural Azcapotzalco

45 canciones de Blues clásico y también local

Una sola manta anunció el concierto

72 asistentes fue la concurrencia total

3 grupos mexicanos tocaron